jueves, octubre 31, 2013

éramos, fuimos, nunca seremos.

Y de repente, zas, todo se acaba. Y piensas 'lo conseguí'. Todo a la garete, recuerdos, números, palabras... Ni rastro de ello. O al menos aparentemente. Supe en el momento en que te conocí que serías complicado de olvidar, pero día a día me fui dando cuenta de que eso, simplemente sería imposible. No me darías razones para intertarlo, pensé. Y mírame ahora.
¿Qué más da? ¿Acaso merece la pena rebuscar entre tanto recuerdo? O entre tan poco.
Emprendí un camino, alejándome de ti, idea forzada por tus actos. Hoy día he vuelto sobre mis pasos veces y veces. Has sido mi medicina, y también mi enfermedad. La bebida, la resaca. Fuiste mi éxtasis y mi ruina. Pero ahora no eres nada.
Nada. No somos, no fuimos y no seremos nada.

lunes, octubre 07, 2013

...and you tell me to hold on

Qué tiene, que engancha. Que ni las luces de París, ni las aguas de Venecia. Qué tiene, que es difícil de olvidar. Por no decir imposible. Pero nada es imposible, ¿no? O eso decías. ¿Acaso ahora soy capaz de regresar? A ese lugar. A ese día. A esa hora. A ese momento... Nuestro momento. Tu momento. Simplemente, inolvidable. Como tu mirada. ¿Y qué hago yo ahora? ¿Qué hay más allá de quererte? Eso no me explicaste... No me contaste cómo volar cuando desaparecieran mis alas. Ni como respirar cuando se evaporara mi oxígeno... Tú. Tú, y sólo tú. Eres un gran motor, ¿sabes? Me impulsaste. A hacer cosas que nunca habría hecho, a soñar, a reír, a vivir. Me enseñaste. Me enseñaste todo lo que se le puede enseñar a una persona recién llegada al mundo. A tu mundo, el mío, el nuestro. Me hiciste flotar. Creaste lugares, palabras y melodías que nunca saldrán de mis entrañas. Me creaste a mí. Sabes... Jode mirarse al espejo y ver más de una mitad tuya. Antes esa mitad era completa, con tu sonrisa como accesorio a mi mirada. Antes. Antes todo era perfecto, ¿eh? Antes las inyecciones eran como chutes de felicidad. Los exámenes eran, en su manera, otra forma de recordarte. Antes éramos nosotros. Tú eras yo. Yo era tú. Pero antes... Y llegó el después. Llegó el otoño que llega después de cada verano, y le sucedió el invierno. Llegó el frío. Ese frío que antes me hacía setirme en los infiernos estando a tu lado. Se apagaron las luces. Ya nada es tan claro en medio de la oscuridad, ¿eh? Llegó, por así decirlo, el final. Llegó la muerte. Una muerte dulce y rápida. Muerte que no acaba con todo. Muerte que acaba con nosotros, no con nuestros momentos. Muerte que me hace morir. Muerte que a la vez me da la vida. Llegó el ahora. El ahora que duele, el ahora que quema. Porque como solías decir, el hielo también quema, ¿no? Llegó el ahora. Llegó el momento de afrontar, sonreír, y olvidar. Pero ahora... Ahora me encuentro aquí. Donde antes. Tú y yo. Todo. Y ahora nada. Y me pregunto... Qué hice mal... Qué hicimos mal... Es dura la rutina sin ti. Esa misma que acabó con nosotros. Pero ahora... Ahora mismo... En este instante... Me preguntan por las drogas... Y yo les hablo de tu sonrisa.

Nothing left to say now.

A veces me gustaría estancarme en un instante, ¿sabes? Sí, justo en ese instante. Cuando ves a esa persona que tanto te importa marchar por el camino de vuelta, y no mirar atrás. Ese instante en el que puedes escuchar los pedacitos de tu corazón derrumbándose. Y es justo en ese instante... Cuando me gustaría parar. Abandonarlo todo, abandonarme a mí. Pensar, recapacitar. Intentar recuperarme. No sentir la presión de los días sacándome esa falsa sonrisa... No sentir esas miradas gritando 'Deberías olvidar ya'. Me gustaría encerrarme. Encerrarme en mi misma. Entre mis pedazos. Reagruparlos. Encontrar a qué lugar pertenecías... A cuál pertenezco yo. Superar. Y guardar esos recuerdos en ese cajón nunca abierto. Y no mirar atrás. Y borrar esa imagen tan repetida. Y acostumbrarme a caer... A darme de bruces contra el suelo, contra la realidad. Me gustaría, por un instante, gritarte cada una de las cosas que siento. Pasar horas y horas, así, a tu lado. Temiendo tu partida pero disfrutando del momento. Ese eterno. Ese que se repetiría a cada segundo en mi cabeza. Parar. Y mirar. Ver cómo el mundo sigue. Cómo sigue sin ti. Y golpear, destrozar cada una de las cosas que en su momento me golpearon a mí. Porque, ¿sabes? En esos momentos sí, el mundo sigue, pero sigue sin mí.

viernes, agosto 30, 2013

Roma habita en tus sueños.

¿Amor? ¿Qué es eso? Esa fuerza invisible, pero presente a cada segundo. Esa fuerza que hace que los pálpitos de esos corazones aceleren de un segundo a otro. Que consigue que un sabor, un olor, una melodía.. Nos lleve hasta la gloria. Esa fuerza que nos hace seguir adelante, y, a veces, nos ralentiza incluso un poco más. Pero al fin y al cabo es fuerza. Fuerza para luchar, para vivir y para sonreir.
Esa fuerza que me podría mantener atada a tu imagen durante horas. Aferrada a tu voz, y sólo a eso. Esa que hace que me entren ganas de dejarlo todo, por ti.
Porque no sabes lo que eres. Lo que eres para mí. ¿Cómo se podría explicar? Lo eres todo. Eres la razón de esas caladas de aire fresco, la razón de esas lágrimas, la razón de tantas cicatrices y de tantas ojeras y sonrisas cansadas. Eres la razón de cada uno de los movimientos de mi cuerpo. La razón de mis silencios. La razón de mis palabras. La razón de cada uno de mis saltos. La razón de esa atracción por ser impulsada hacia el vacío. La razón, a secas. Mi razón.
Y bueno... En definitiva, ¿qué es amor?
  Amor, eres tú.

viernes, agosto 16, 2013

¿Qué ha pasado? No sé, explícamelo tú. ¿Dónde han quedado todos esos 'te echo de menos'?, ¿dónde quedaron tus ganas de hablar conmigo?, ¿dónde has quedado tú? Tú. El de verdad, o puede que en ese momento hasta fueras el de mentira. Pero, ¿en serio? ¿En serio olvidas tan rápido?
Esos 'te quiero' ya no suenan igual... Ya no saben igual, ya no son sinceros. O puede que en el fondo sí. Por lo menos por mi parte.
¿Sabes? Me gustaría decirte tantas cosas. Me gustaría que con sólo mirarme me entendieras. Me encantaría tenerte. Puede que no te necesite aquí, pero te quiero aquí. Y te quiero tanto... Quiero que vuelvan las sonrisas. Quiero que vuelvan las lágrimas, pero las de felicidad. Quiero incrustarle de nuevo esa melodía cotidiana a mi vida, tu voz... Quiero que vuelvan esas ganas de volar... Y esa capacidad para sentirme capaz de ello. Quiero que estas cuatro paredes vuelvan a quedárseme pequeñas, y no que me queden gigantes, y me recuerden a cada segundo todas esas ilusiones rotas y perdidas.
Joder, quiero colgarme de ese puto reloj, y girar sus manecillas. Ese reloj llamado tiempo, llamado vida. Quiero volver a empezar, pero empezar contigo. Porque no sabes lo complicado que es ésto sin ti.
Ven. Dame fuerzas. Dame alas. Dame vida. Porque basta una sola mirada tuya para poder reemplazar el inútil latido de mi corazón. Necesito tu aire. Tu risa. Te necesito con tus cosas malas y con todas esas cosas buenas que eclipsan a las demás.
Necesito tu voz para sustituir a esos suspiros. Necesito tu gloria, necesito tu felicidad, para darle sentido a la mía. Te necesito, tío, y jode estar así.

sábado, julio 20, 2013

¿Nunca has tenido ganas de dejarlo todo atrás? ¿Nunca has tenido ganas de coger ese tren, ese con billete de ida, pero sin uno de vuelta? ¿Nunca has tenido ganas de colgarte de ese puto reloj, y parar las agujas, o moverlas a tu gusto, hacia el pasado? ¿Ganas de desaparecer? ¿Ganas de... vivir?
Venga, ¿quién no? ¿Quién no ha querido nunca tirarlo todo por la borda? Revivir, salir, correr, volar. Ser libres, seguir los pasos de muchas de las mejores canciones de todos los tiempos. ¿Quién no se ha sentido muerto estando vivo alguna vez? Dime. Quién no ha querido meterse bajo tierra en algún momento... y salir de un brinco, mostrando todas sus fuerzas y su majestuosa sonrisa cuando estuviese dispuesto. ¿Quién no ha meurto pro amor? ¿Quién no ha vivido gracais a él? Dime, ¿me oyes ahora? Ahora que ese tintineo molesto ha desaparecido de mi cabeza. Ahora que tengo las fuerzas suficientes como para chillar, lo que siempre me he estado cayando. Dime... ¿lo entiendes ahora acaso? ¿Entiendes que no soy un jodido mueble en el que apoyarte cuando te cansas, y que luego dejas de lado como si de nada se tratase? ¿Entiendes lo que he dado? Todo lo que he podido tener, y lo que ni he tenido.. Y todo te lo he dado a ti. ¿Entiendes acaso tanto sufrimiento? Tantas lágrimas.
Entiendes que no quiero seguir así, ¿no? Que o contigo o sin ti. Que si no quieres, puerta. Que quiero reír con la mayor fuerza y gana que he podido llegar a tener nunca.
¿Entiendes acaso por qué te quiero? Porque eso no lo entiendo ni yo...
Pero bueno. ¿Quién entiende esta vida? O mejor dicho, ¿quién me entiende a mí?

jueves, julio 18, 2013

tú.

¿Qué piensas? ¿Qué quieres decir? O lo más importante... ¿qué quieres decirme a mí? Yo, personalmente, quiero saberlo todo de ti. Tus miedos, tus gustos, tus debilidades... si tienes el corazón libre, o si ya tiene una persona como dueña. Ésto, por desgracia, ya lo sé. Pero, vaya, me encantaría ser esa dueña. Me encantaría compartir mis mañanas, mis tardes y mis noches contigo. Todos los días de mi vida. Me encantaría decirte eso que llevo tanto tiempo queriendo gritar. Ese "Te quiero" que quedó en el aire. Lo nunca dicho. Lo siempre sentido. Y bueno... me encantaría tenerte.
 Pero, ¿qué decirte? Si todo me atrapa, y nada me sale. Si me aferro a tantas palabras, que cuesta demasiado plasmar.
 Qué hacer, cuando la peor de las sensaciones es esta especia de resaca que siento después de hablar contigo. El miedo a perderte, de nuevo.  Si, todo me recuerda a ti. Absolutamente todo. Si daría lo que fuera por desatar mis alas, y volar hacia ti, hacia tus entrañas, y encontrar un hueco, por muy pequeño que sea, en tu corazón. Si no tengo la fuerza suficiente como apra retomar una historia, nuestra historia, sin ti. Nuestra historia... ¿recuerdas? Ésa que no tendría un final escrito, esa en la que todo estaba por ver, pero era como si sólo tú y yo ya lo hubiésemos visto todo.
 
 Tú. Tú, que eras capaz de retomar el tic-tac de mi corazón, capaz de poner en marcha de nuevo mi motor con tan sólo sentir tu aliento. Tú, que me hacías creerme todas tus palabras, y ahora me pregunto, ¿acaso algo era verdad? Tú, la razón de tantas cicatrices... Tú, la melodía escondida en los cobijos de mi voz, en los rincones de mis labios. Tú, la razón de tantos sueños sin sentido, aparentemente. Tú, tú, tú... Sólo tú. Que ahora vienes y vas, que ahora me tomas por un juguete que ha salido de nuevo en el mercado. Tú, la razón de tantas cosas... La razón de que mis pulmones funcionen, trabajen a la vez. Tú, que en estos momentos, impulsas mi dedo, mi bolígrafo. Tú, que le das vida a las teclas de este mecanismo repleto de historias, de vidas, Tú, la razón de estas líneas, la razón de mis palabras, y, a la vez, la razón de mi silencio.

miércoles, junio 26, 2013

¿Qué me pasa? Quiero gritar, quiero correr, quiero salir. Quiero volver a sentir... y no precisamente este encogimiento de pecho. Queiro sentir tu olor, y tu presencia. Me hace sentir más segura, ¿sabes? Me ha costado asumirlo, pero... Te quiero.
 Y esque cada aroma, cada canción, cada foto... Todo me recuerda a ti. A ti. Ojalá junto a mí. ¿Qué pretendo? Si no puedo ni expresarme. Si cojo un papel y lo dejo más vacío de lo que estaba. Si chillo algo... y nadie me escucha. Ya no. Se habrán cansado de escuchar tantas tonterías.
Pero me gustaría romper las barreras. Todas esas barreras que me separan de ti. Y no sólo de ti... Sino de mí.
 "¿Y bien?", pregunta tu mirada. Seré tu cielo si quieres volar...

Palabras regaladas.

Y en un segundo, "zas", apareces. ¿Cuánto tiempo llevaba esperándote?
Cuantas noches te he querido aquí, cuantos días, cuantos amaneceres... Y ahora que puedo respirar tu aire, sentir tu armonía, sentir tu aroma... Sentirte a ti.
Y entonces, te acercas. Y en ese mismo instante me lo pregunto, "¿Dónde te has quedado? ¿Dónde quedaron tus besos? ¿Tus 'Te quiero'? ¿Dónde quedamos nosotros?". Pero en un momento, encuentro las respuestas, la respuesta a todo lo que me pregunté durante tanto tiempo... Has vuelto, y esta vez para quedarte. Y me susurras... "Por fin te encontré" y esas palabras, que al segundo se desvanecieron en el aire. Esas palabras, que no dijeron nada, y a la vez lo dijeron todo... "Quizás no buscaste lo suficiente"...


... Sí, me encontraste. Pero quizás no tenías que buscar tanto. Al fin y al cabo, me tenías delante de tus narices todo este tiempo.


lunes, mayo 13, 2013

Esos 'pequeña' que nos hacen grandes.

Todos nos acostumbramos a algo. Pequeños 'vicios' que nos hacen ser como somos, que nos hacen vivir a nuestra manera, y que nos hacen destacar. Cosas que, con el tiempo, se vuelven imprescindibles para nosotros.
Respirar, beber, comer... Para algunos fumar, para otros beber. Hoy, yo me he acostumbrado a ti. Es irónico, que haga falta la existencia de otra persona para darle sentido a la mía. Y ahora me pregunto... ¿y cuando me faltes?
He construído un mundo cerca de ti. 'Cerca', relativamente. Nos falta ese contacto físico que hace que nos sobre una pizca del denominado sentimental. Y esque hoy me has dado la fuerza. Esa fuerza que a todos nos falta y que no podemos construir por nosotros mismos. Esa fuerza para salir, correr y hasta, si te lo propones, volar. Pero sólo a tu lado, porque cuando no estás se apaga ese motor ¿Mi media naranja? Tú eres mi pieza entera. Eres mi oxígeno, mi agua, mi comida... Serías mi tabaco si fuera fumadora, y mi bebida si bebiera. Eres mi melodía cuando canto, y mis movimientos al bailar. Definitivamente, eres esencial. ¿Y el día en que me atreva a decírtelo? Sin rodeos, sin vergüenzas.
 Todos empezamos como extraños. Pero hoy tú formas parte de mi vida. Me atrevería a decir que eres mi vida.
 Decido elegir. Y te elijo a ti. A tus 'Buenos días', a tus 'Amor', a tus 'Mi niña'. Tus 'Mi...', que me hacen sentir tan especial.
A tus 'Pequeña', que me hacen ser día a día más grande.

miércoles, abril 24, 2013

Sigo luchando.



jueves, marzo 28, 2013

Missing you.

'no podemos remar en contra de nosotros mismos...'
'he cruzado océanos de tiempo para encontrarte'

;

  • "Las ventajas de ser un marginado"
  • "Bajo la misma estrella"
  • "Nunca seré tu héroe"
  • "Si tú me dices ven... Lo dejo todo, pero dime ven"
  • "El libro amarillo"
  • "Claudia"